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Hace semanas que escuchamos villancicos por las calles y en los comercios, hace semanas que las luces, los adornos navideños y el ambiente nos indican que está llegando esa fecha tan deseada para algunos y tan poco amigable para otros; esa fecha de reencuentros entre amistades de hace años y entre familiares que viven a kilómetros de distancia; esa fecha en la que nos reunimos de forma especial con los compañeros del trabajo o con los amigos de toda la vida; esa fecha en la que regalamos y recibimos regalos de nuestros seres mas queridos y en la que los anuncios de perfumes y juguetes llenan nuestras televisiones; una fecha donde se respira otra sensación, donde nos sentimos más unidos, más amigos, más familia…y si, como todos estáis pensando esa fecha es la NAVIDAD.

Hay mucha gente que espera con ansias la llegada de estos días para reencontrarse con viejos amigos o simplemente para pasar mas tiempo en familia y reunirse con aquellos que no ve a diario. Sin embargo, hay otras muchas personas a las que no le gustan, por la ausencia de familiares o amigos que ya no pueden compartir con nosotros esas cenas de Nochebuena o Nochevieja, o ese día de Navidad, pero esto, por desgracia es así, el tiempo pasa y muchas personas nos van dejando, pero debemos tener en cuenta que a estos seguro que les encantaban estas fechas, seguro que disfrutaban celebrando la Navidad como se merece, por lo que no debemos perder este espíritu y tenemos que seguir compartiendo estos momentos con los que aquí siguen, sin dejar de pensar en los ausentes.

Sin duda, no debemos olvidar a los niños, para ellos si que son unas fechas mágicas, ellos no entienden de cenas de empresa ni de cenas de amigos, ellos solo entienden que van a cenar con sus tíos, sus primos, sus abuelos,… que una vez al año van a juntarse todos y van a pasar una noche de risas, donde no hay discusiones, una noche en la que van a cenar con su tío que vive en el extranjero o con sus primos que vienen de fuera, una noche en la que van a ver a sus padres reírse y pasarlo bien fuera del estrés laboral que se vive a diario. Además de esto, ellos esperan con ilusión la noche mágica del 5 de enero…esa ilusión que no deberíamos perder ninguno, esa ilusión por la llegada de aquellos 3 ancianos Reyes de Oriente; se preguntan: ¿me traerán todo lo que he pedido?, ¿me habré portado bien este año?,… Por tanto, nosotros los adultos nos tenemos que quedar con este espíritu de ayuda, de fraternidad, de amistad, de unión y de magia que se respira en Navidad, con todos estos valores que deberíamos de respetar todo el año y no solo en estas fechas.

Le invito a plantearse una Navidad continua que comience el 7 de enero, a mantener el espíritu, que a toda la gente le guste o no, le mueve en estas fechas. Viva la Navidad como lo que es, disfrútela en compañía de sus familiares y amigos, sueñe despierto, ayude, sonría en la calle, cante villancicos, espere con ilusión la Noche de Reyes y mantenga ese espíritu el resto del año, la vida esta hecha de estos pequeños momentos y somos nosotros los que decidimos como vivirla.

Desde la clínica dental Miguel Molina Navarrete les deseamos a todos una Feliz Navidad y un Próspero Años 2018, en el que todos sus sueños y deseos se hagan realidad.

 

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